hola frank bendiciones, en mt 17.25-27 Jesús dice“Qué te parece, Simón: los reyes de la tierra ¿de quién cobran las tasas o tributo, de sus hijos o de los extraños?” 26 Respondió: “De los extraños”. Entonces Jesús le dijo: “Así, pues, libres son los hijos. a qué se esta refiriendo?
Submitted by: juan 09/16/2019
Hola Juan. Los cobradores del templo no se atrevieron a ir directamente donde Jesús, sino se lo mandaron a decir a través de uno de sus discípulos: ¿Vuestro Maestro no pagan el impuesto al Templo? Realmente las dos dracmas no eran un impuesto, sino un tributo que se daba al templo judío y en el texto griego la palabra que se usa es dídrajmon (δίδραχμον), que literalmente podría traducirse como dos dracmas. Evaluemos un poco más de que se trataba todo esto. En primer lugar, en tiempos de Jesús existían los impuestos que eran cobrados por los romanos a los pueblos que conquistaban e iban directamente al tesoro de ellos. A parte de eso estaban los tributos que se pagaba al templo con el fin de contribuir al templo y los sacerdotes que allí trabajaban. Este tributo había sido establecido en los tiempos de Moisés: “Esto dará todo aquel que sea contado; medio siclo, conforme al siclo del santuario. El siclo es de veinte geras. La mitad de un siclo será la ofrenda al Señor, (Éxodo 30,13 Se ordenaba que todo adulto de 20 años pagara su tributo el cual era de medio siclo, el cual equivalía a dos dracmas en los tiempos de Jesús. Una dracma era la moneda griega universal que equivalía al pago por una jornada de trabajo. Este tributo era de carácter obligatorio y los cobradores solían poner sus mesas de cobro en cada una de las aldeas de Israel con el fin de cobrarlo y como Jesús había estado lejos de Capernaum no había podido pagarlo y fue allí cuando aquellos hombres le preguntan a Pedro al respecto. Ante la pregunta de los cobradores de los tributos Pedro regreso a la casa a buscar a Jesús con el fin de contarle lo que había pasado, pero como Jesús era omnisciente (como Dios sabia todo), le pregunto a Pedro: ¿Qué te parece, Simón? Los reyes de la tierra, ¿de quiénes cobran los tributos o los impuestos? ¿De sus hijos, o de los extraños? Siempre que una nación conquistaba a otra esta al ser sometida se le imponía el pago de los impuestos como en el caso de Roma e Israel, y solo los ciudadanos de la nación conquistadora y los reyes y príncipes estaban exentos de pagarlos. Jesús era el UNICO Hijo de Dios y como tal no tenía por qué estar pagando estos tributos; sin embargo, en lugar de negarse se somete a las autoridades del templo, ya que también había venido a esta tierra para obedecer la ley de Dios, y este tributo era ordenado en el libro de Éxodo. Sin embargo, para no ofenderles, ve al mar, y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tómalo, y al abrirle la boca, hallarás un pez; tómalo, y dáselo por mí y por ti. La palabra griega que se traduce como ofenderles, es eskandalídso (σκανδαλίζω), que literalmente significa escandalizarse a tal punto de poner tropiezo en la vida de alguien. Con el fin de no escandalizar a nadie o poner tropiezo en otros, nuestro Señor Jesús decidió pagar el impuesto, siendo así ejemplo de un hombre que se sujetaba a Dios y su ley. El Señor nos enseña a muchas veces ( en cosa que no son pecado) ceder y parecer perdedores a la vista de otros que ser piedra de tropiezo El más sabio no es el que grita, el más sabio es el que sabe callarse a tiempo. El pez llamado hoy de San Pedro es un pez poco conocido que abunda en el lago de Galilea. La hembra de este pez expulsa los huevos que son capturados por el macho que los incuba cerca de las agallas. Cuando los tiene que expulsar el pez toma una piedrecita y la pone en su boca y puja para que salga la cría. Es posible que el pez haya tenido alguna moneda en vez de piedra, el milagro es que Jesús sabía que esto iba a suceder y que el pez tenía la cantidad exacta. El Señor no es un mago que hace actos propios de estos. En Cana saco Vino DEL AGUA, en la multiplicación de los panes los multiplico de cinco panes y dos peces. El Señor para hacer el Milagro debe de encontrar algo (aunque parezca imposible o pequeño) si tu no pones tu parte el Señor no actúa. Esta es la enseñanza de este Evangelio. Como digo “el Señor no cria vagos”. Bendiciones